jueves, 11 de diciembre de 2008

Al acecho



El taxi se detuvo sobre la calle Yerbal, junto a las vías del tren.Me bajé y comencé a buscar la altura exacta hasta que distinguí una casa de dos plantas, con varias ventanas, una gran entrada, un garage vacío y muchas flores ubicadas en bonitos maceteros justo detrás de las rejas que la separaban de la vereda.
Esa era la casa de Laura, pero aún no sabía quién era ella ni qué relación tenía con Manuel que lo había obligado a mentirme.

Recorrí la cuadra, de un lado al otro, pensando qué sentido tenía estar jugando al detective cuando ya empezaba a ocultarse el sol.No tenía un plan delineado y mientras pasaban los minutos me convencía de que estar allí como un turista en un país desconocido no tenía ningún sentido.
Caminé entonces por el costado de la vía.Estaba oscuro, pero había un ir y venir de automóviles que alejaba mi inseguridad.Encendí un cigarrillo.En lo negro de la noche podía percibirse la ausencia de alguna persona dentro de la casa.Ninguna luz encendida.Silencio.

Había pasado casi una hora desde mi llegada cuando un auto con vidrios polarizados se detuvo frente a la entrada.De su interior descendió una mujer.Debía rondar los cuarenta años, rubia, de pelo ondulado, alta, delgada, atractiva.Abrió la reja que conducía al garage y regresó al auto para poder estacionarlo.
Mi corazón latía tan fuerte que podía sentir las palpitaciones en cada rincón de mi cuerpo.Era Laura, la misma que había llamado al celular de Manuel y que lo había alejado de mí para hablarle en privado.Era la dueña del mensaje en el contestador y verla me provocaba un odio con olor a nuevo, raro, ajeno a mi.

Volvió a bajar para cerrar la reja, regalándome su mejor perfil, para que pudiera registrar su imagen en el fondo de mi retina.
Al volver al auto, abrió las puertas traseras y ayudó a bajar a dos nenas,tan rubias como ella.La mayor debería rondar los seis años, la menor arañaba los dos.

Sentí que nuevamente volvía a respirar.Manuel sería incapaz de involucrarse con una mujer casada y con hijos.Pensé que debía ser alguna amiga de la infancia y que temiendo por mis celos había preferido ocultarme la verdad.
Pero algo me había impulsado hasta su puerta, y recordé que mi sexto sentido jamás me había fallado con mis novios anteriores.Así como los ciegos distinguen el terreno, hay algo que las mujeres sabemos reconocer en el nuestro.La espina no había desaparecido, y aunque mi mente se empecinaba en resaltar la idea de que Manuel no se involucraría en una infidelidad tan complicada, mi voz interior me repetía que no debía irme de allí, que había algo más.

Me quedé.Caminé cada baldosa hasta gastarla, dejándole la huella de mi espera.En el interior de la casa, las luces encendidas me señalaban que esa visión era cierta y no un sueño, ni una escena de una película.Yo estaba ahí, como un lobo al acecho.

De pronto, la vi salir en dirección al auto, cargando carpetas y papeles.Las acomodó en el baúl con dedicación y paciencia.La nena más grande salió a los cinco minutos, cargando un teléfono en su manito, y acercándoselo a ella.Laura llevó el teléfono a su oído y le hizo señas a su hija de que entrara.Caminaba mientras hablaba y sonreía, cerca de la reja, pegada a las flores.

Fue entonces cuando sentí un impulso, como un rayo que me atravesaba la consciencia.
Tomé el celular y disqué restringido el número del celular de Manuel.

Mis piernas temblaron como un niño abandonado en medio de la noche cuando del otro lado escuché el mensaje que me indicaba que Manuel estaba hablando, en ese mismo momento...

27 comentarios:

Mu dijo...

quiero que quede constancia que hace rato que te leo pero no comento porque,si es real tu historia,es tuya y no da para decir nada y si es ficticia,tampoco peeeeeeeeeeeeeeeero tampoco comento porque no me gusta tanto suspenso suspensórico.
ya sé que es tu estilo y tu blog así que no te lo estoy criticando (bue,un poco si)

jajajajaja!!!

Besos,Miranda.

Anónimo dijo...

transpiré mucho cuando te bajaste en yerbal, como te habia dicho
pero gracias a dios no era rubia la mia....
igual que nervios...
mi sexto sentido de hombre (si eso existe), es que despues de cortar lo llamaste a octavio...

no?

Julian

Miranda dijo...

MuMiNa:De cualquiera de las dos formas respeto tu decisión de no comentar.El tema del suspenso es inevitable.No puedo contar toda la historia en un solo post y por suerte o desgracia mi vida con Manuel empezó a estar llena de este suspenso, más dudas, más ...
Un beso y gracias por la sinceridad.




Julián: No te marees con los tiempos.Yo salto de la historia de Manuel a la de Octavio, pero no son parelas...Acá Octavio no había aparecido.Besos!!

Anónimo dijo...

me tiene totalmente atrapada tu historia... espero seguir leyendote!!!


besos, Mari!

Anónimo dijo...

Hay que animarse a hacer de detective eh? porque en el fondo uno sabe que va a encontrar algo que no quiere ...
Que dolor tan grande cuando el teléfono dió ocupado, pudo ser casualidad, pero creo que vos ya tenías la certeza.
beso
Any

Sherezada dijo...

Qué momento!!! quiero saber MÁS!!!!

Cintia dijo...

chan!

La Vaka dijo...

Yo también quiero saber más!!!

Logras que mis nervios estén a tope!!

Anónimo dijo...

Mmm seguro usted se hizo la película. Igual, si él te estaba engañando y vos luego lo hiciste con él, están a mano...
¿Fue esto lo que te hizo tener algo con Octavio? ¿te vino como anillo al dedo?
Veremos, después lo sabremos.
Besos

El Tano dijo...

Para mí fue pura casualidad lo del llamado y sino, hay que avisarle a Manuel que la máxima de todo hombre debería ser negar, negar y después volver a negar. Siempre lo digo: si a mí me enganchan en una cama con otra mina llegaría hasta inventar que soy mi hermano gemelo que mantengo oculto por alguna intriga familiar lejana.

Krocita dijo...

No puedo más que decirte que la historia me encanta, pero siempre necesito saber más! Ya me acostumbré, ahora a esperar la próxima. Besos

Krocita dijo...

Mumi, a mi también me vuelve loca tanto suspenso, y me gustaría apretar ff para adelantar y saber el final, jajajajaja.
A esperar hasta mañana.

Mu dijo...

¡JA!
Con MIranda me pasa lo mismo que con la shilena,no comento porque es como escribir sobre un libro y yo soy chapada a la antigua,no arruino los libros.
Le hablé hoy para que sepa que tiene más lectores que comentaristas y sí,largué mis mumineadas yaquestaba.

CANDE dijo...

Y?????????????????????

Unknown dijo...

No lo puedo creer me parece como si lo estuviera viendo, es verdad lo del sexto sentido de la mujer, te lo digo por experiencia propia.Por FAVOR no nos hagas esperar tanto para saber como sigue... SELMA y yo nos comemos las uñas mientras lo leemos.Ahi van mis BESOS BRUJOS

fluor dijo...

tremendo, me siento increiblemente identificada. creo q a toda mujer le paso alguna vez algo parecido y penso en hacer lo que hiciste vos pero no nos animamos.
te sigo.

besos

AZUL dijo...

TE SIGO LEYENDO,,,
BESOSS

Miranda dijo...

Mari: Muchas gracias por seguirme, besos.


Any:De eso se trata esto, de dolores.Besotes.

Miranda dijo...

Circe: Ahi voy, besos.



Cintia: Tal cual.Besos.

Miranda dijo...

La Vaka: relajate, me siento culpable.Besitos.



C@rito:¿A mano? No lo creo, pero bueno...besotes.

Miranda dijo...

El Tano: Tarde o temprano llegaría un momento donde no podrías sostener la mentira...por algo dicen que tiene patas cortas. ¿Querés pruebas? Seguí leyendo. Besos.




Krocita: No es para tanto, pensá que peor es haberlo vivido.besos.

Miranda dijo...

MuMiNa: No hacía falta que aclararas, en serio!! Un besito.




Cande: Ahí sigue, beso.

Miranda dijo...

Simplemente Clau: Gracias por los besos brujos, me llegaron.Otros para vos.



Flor: Hay que llegar siempre al final.besos

Miranda dijo...

Azul: Sé que estás ahí, besos.

Piti Sarlanga dijo...

Ojo, no te comas cualquiera, la telefonía móvil anda tan mal, ultimamente...

el_iluso_careta dijo...

que momento....
sigo...

...(des)encontrada... dijo...

Que fácil es para otro juzgar la vida de los demás. Acá te sigo leyendo..
besos
Des